Escrito por: Facundo Rossi
El Senado de Mendoza aprobó una ley que permite que los padres cierren las cuentas de sus hijos en billeteras virtuales de forma unilateral y de modo automático. Es una medida para combatir la ciberludopatía juvenil, además de un intento de controlar la actividad financiera de los menores.
Mendoza tendrá mayores controles parentales en el juego online.
Nueva ley de control parental financiero en Mendoza
El Senado de Mendoza oficializó cambios en la Ley de Defensa del Consumidor, que fueron dados a conocer por la página web de la Cámara y por el Boletín Oficial de la Provincia. Se trata de un reglamento mediante el que los padres podrán acceder a toda la información de las cuentas de sus hijos en billeteras virtuales.
La normativa se extiende para todas las cuentas creadas por menores de edad, teniendo en cuenta que, en Argentina, los niños pueden registrarse en plataformas como Mercado pago desde los 10 años, con el permiso de su tutor. Las modificaciones intentan llevar más seguridad a padres y usuarios.
Con la incorporación del artículo 44° quinquies a la Ley 5.547, los adultos tendrá a disposición todos los datos de cuenta de sus menores a cargo: el historial de transacciones, las transferencias enviadas y recibidas, y la información de cualquier instrumento financiero que se gestione desde la app.
Sobre todas las cosas, la noticia generó repercusión porque los padres podrán cerrar las cuentas de sus hijos de modo unilateral, sin consultarlo y de manera directa. Es una decisión que se enfoca en prevenir el uso indebido del dinero entre niños y adolescentes.
La propuesta fue presentado por el senador Félix González y, tras su aprobación, fue ratificada por ambas cámaras legislativas. El legislador peronista expresó que la medida es el puntapié inicial para formar un entorno digital más seguro en el que los menores puedan desarrollar su vida económica.
Otros legisladores también expresaron su preocupación por el modo en que los niños y adolescentes pueden disponer de su dinero online. Por ejemplo, la senadora Silvina Gómez, de la Unión Cívica Radical (UCR), no dudó en calificar la situación como una revolución digital, frente a la que hay que desarrollar políticas de prevención.
Los menores de edad y el uso del dinero online
Con esta medida, las autoridades provinciales celebran que Mendoza está a la vanguardia en materia de ciberseguridad y protección de menores en el territorio argentino. Pero la modificación a la ley se da en un contexto delicado a nivel nacional, marcado por la desocupación y la falta de oportunidades.
Además Argentina es uno de los países más laxos de América Latina en lo que se refiere al manejo de dinero online entre menores de edad. Solo Brasil permite que los niños desde los 10 años accedan a esos servicios, en ese caso a través de la plataforma Pix.
Pero en México, Chile y Colombia el ingreso a Mercado pago es a partir de los 13 años, y en Perú directamente a partir de la mayoría de edad. Además, Argentina se ha convertido en uno de los pocos países donde los niños desde los 13 años pueden invertir en instrumentos financieros complejos.
Esa medida fue adoptada el año pasado por la Comisión Nacional de Valores (CNV), como parte del plan económico del ministro Luis Caputo. Bajo su gestión el país se orienta al negocio financiero mucho más que a la producción o la busca de valor agregado.
Además los niños están bombardeados por estímulos de consumo a través de contenidos específicos, como videojuegos o entretenimientos digitales, en los que muchas veces se ofrecen beneficios pagos. Los padres podrán cancelar cualquier suscripción y limitar las transferencias a cuentas comerciales, entre las nuevas facultades que propone el reglamento.
Un alto para la ludopatía juvenil
Uno de los principales motores de esta ley ha sido la busca de un freno para las apuestas ilegales entre menores de edad. Mendoza es una de las provincias donde el juego online fue reglamentado, y hay siete plataformas con licencia, el máximo permitido por la ley.
A pesar de la oleada regulatoria en varias provincias, el desarrollo de los sitios regulados se ha visto acompañado por una proliferación de plataformas clandestinas. Son páginas o apps que no utilizan control de la identidad, y por lo tanto no verifican la mayoría de edad de sus usuarios.
Si bien los reguladores han estado persiguiendo a los responsables y bloqueando los dominios, la situación escaló hasta llegar a una verdadera crisis de ciberludopatía en niños y adolescentes, algo que nunca se había visto. Algo que se ha comunicado desde entidades educativas, eclesiásticas y de investigación.
El control parental está diseñado para que los mayores a cargo anulen cualquier actividad relacionada con el juego online. Fue uno de los puntos centrales del debate en las dos cámaras parlamentarias.
La diputada Valentina Morán, del justicialismo, afirmó que aunque los menores tengan prohibido el acceso, consiguen filtrarse igual en plataformas sin verificaciones. Con el nuevo sistema habrá una barrera más, que dependerá de los responsables a cargo.
